El testimonio está a la vista en las imágenes siguientes. Sus obras, a pesar del paso del tiempo ahora existen libres de crítica. La civilización ha inmortalizado a estos pintores clásicos para que nos enseñen a pintar y también imitemos de ellos la lucha interior que todo artista debe dar para sentir satisfacción sin fama y dinero. Canalizan el ímpetu del artista joven y le inspiran para zanjar diferencias entre un estilo incipiente que recién ve la luz y el deseo de alcanzar la maestría.
Cada vez que exteriorizaron su gracia innovadora, muchos de estos pintores clásicos tuvieron que vivir como héroes ya que en repetidas ocasiones, junto con el desprecio de sus pares se les relegó al olvido. Sin embargo, con el paso del tiempo, estos genios que en su época fueron visionarios solitarios, hoy son admirados universalmente. Por esta razón a ningún artista, que aporta un estilo inédito, le debe extrañar si eventualmente es segregado por sus creaciones. Los maestros nacen y mueren como tal. La historia demuestra que la singularidad prevalece y no existe nada que se lo impida.
Cada vez que exteriorizaron su gracia innovadora, muchos de estos pintores clásicos tuvieron que vivir como héroes ya que en repetidas ocasiones, junto con el desprecio de sus pares se les relegó al olvido. Sin embargo, con el paso del tiempo, estos genios que en su época fueron visionarios solitarios, hoy son admirados universalmente. Por esta razón a ningún artista, que aporta un estilo inédito, le debe extrañar si eventualmente es segregado por sus creaciones. Los maestros nacen y mueren como tal. La historia demuestra que la singularidad prevalece y no existe nada que se lo impida.